jueves, 25 de agosto de 2011

Y, de repente...

Uno va cumpliendo años y, a la vez, va atesorando experiencias con los hombres. Algunas de ellas son malas y, por el contrario, otras son muy, muy malas.


Al principio jode. Es una verdad universalmente reconocida que si algo, en lo que has puesto ilusión, sale mal no es extraño sentirse descorazonado.


Sin embargo, sigues cumpliendo años y las malas experiencias y/o fracasos continúan. Llega un momento en el que, oh mierda, hasta te acostumbras e intentas buscar el "punto divertido" de cada historia.


Hasta que... ¡zas! ¡zas! ¡zas! Llegas a una edad en la que REALMENTE odias este tipo de "soltería perpetua" en la que, sin explicación aparente, te ves recluído.



La otra posible explicación es mucho más sencilla: Has pasado demasiado tiempo sin un tio en la cama y, en una tarde de calor horrible, has pensado más de la cuenta.



He dicho.

1 comentario:

  1. pues yo creo que la soltería es buena...siempre que no te falte sexo!!!ánimo compi!!!

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