domingo, 10 de marzo de 2013

Esperando el turno



Número actual de amigos: 0.

Días que faltan para mi despido: 2.

Vuelvo a escribir por segunda vez hoy aquí ya que, como indico al principio, mi número de amigos se ha visto reducido al mínimo y, entre las opciones para poder expresar mis sentimientos estaban escribir aquí o contárselo todo a mi cactus. (Sí, el cactus podría haberse puesto contento, pero creo que el hecho de escribir por aquí estupideces de vez en cuando es algo terapéutico que ayuda una vez que todo ha pasado y hasta uno puede reírse).

El finde no ha sido tan horrible después de todo, pero porque me he puesto en modo autómata. Mi amiga sigue sin dar señales de vida (lo cuál quiere decir que sigue enfadada) y yo he estado corrigiendo exámenes mientras mi mente se disipaba y viajaba por diversos temas.

Uno de ellos es el día de mañana. Y es que mañana es un día un tanto decisivo. He de convencer a mis compañeros (a los que conozco solamente de hace 4 semanas) para que dejen su restaurante favorito y vayamos a comer al restaurante donde come el chico de la estúpida ilusión tonta. No por nada en especial, más que nada ya que es mi último lunes... no estaría mal poder verlo de nuevo, a modo de "gran despedida".

Ay... necesito conocer gente nueva. Necesito dejar este "papel secundario" en el que me recluido y empezar a actuar en la primera línea, como actor protagonista de mi vida. Yo necesito historias de amor, aunque luego salgan mal. No puedo seguir estancado mientras el resto de personas a mi alrededor evolucionan en sus vidas, se casan, tienen hijos, disfrutan de vidas aparentemente apasionantes...

A ver si me llega ya el turno.


No hay comentarios:

Publicar un comentario