Ya hace un año

Finalmente el fin de semana fue muy bien. El sushi estaba rico :)

La entrada de hoy no tiene mucho sentido, pero yo creo que ya nadie espera encontrar por aquí cosas racionales, así que seguiré adelante.

Anoche soñé con un chico, uno que me ha gustado prácticamente desde siempre. Para muestra un botón link. 

Es cierto que no me lo he vuelto a cruzar, principalmente por mi vida monjil de ahora, pero fue un sueño MARAVILLOSO. De esos en los que al despertarte piensas "mieeeerda, yo prefería la vida del sueño".

Y es que, claro, ha pasado casi un año desde que me quedé babeando como un tonto a escasos metros de él.

Aysss...

Sushi-Sábado

Este sábado es la pre-selección de eurovisión. Y, visto lo visto, de momento va a ser mi mejor planazo en lo que va de año. Soy así de freak/cutre, lo siento.

Hace un par de días tuve un pequeño acercamiento con El Chico de la Postal de Dodo. A veces sufro de faltas de riego emocionales que me llevan a cometer semejantes actos de imprudencia, ¿qué le voy a hacer?. Y está guapísimo (maldito sea) pero sigue rematadamente estúpido (maldito sea). 

Así que nada, pienso que este fin de semana, que además estaré solo en casa, va a ser íntegramente para mí. Me lo merezco. Apartaré los tochos de libros sobre historia americana y además ¡voy a cenar sushi!.

Me encanta. Creo que es, junto con el chocolate, uno de los grandes aliados de l@s solter@s.

Resaca Post-San Valentín

Al final pasé de nuevo otro San Valentín soltero. Sí, sé que es un día principalmente comercial y que lo importante es que el amor se demuestre cada día y bla bla bla...

No obstante, en mi caso ha sido peor el día después. No he querido darle demasiada importancia, pero sí que uno se para a pensar que "aún no ha llegado" y he estado todo el día en modo "ugh".

Mas todo tiene su lado positivo. Así que me he autoregalado varias cosas para celebrar, no mi soltería, si no mi genialidad. No es que me haya vuelto egocéntrico y altivo ahora, es que cuando uno se gasta demasiado tiene que buscar una excusa muy buena para poder justificar, de alguna forma, este pequeño desliz/recompensa:

DVD (que aún no he visto pero confío plenamente en que sea una película genial)

Camiseta de manga corta maravillosa de James Dean

Pantalones azules geniales

Chaqueta vaquera

Mango ha ocupado el maravilloso pedestal en el que tenía a Zara (jodida y maldita Zara). Salvo la chaqueta, que es de nueva temporada (cabrones, bajad los precios) y porque llevaba tiempo tratando de encontrar una que fuera talla no-asiática, lo demás estaba en rebajas.

Fucking typical

Prometo que he conseguido "superar" la situación de desconcierto. De hecho, la he superado por segunda vez y además he salido reforzado (deben ser los 27 que me sientan genial). De manera que hoy el mensajito de Chico, tras varios días de pasotismo mutuo, me ha sorprendido pero no me ha sobresaltado.

En mi anterior fase de locura denominada "por qué no quiere quedar conmigo???" el mensaje de hoy habría sido motivo para una fiesta. En la fase de rabia "maldito cerdo cabrón" el mensaje de hoy habría bastado para insultarlo claramente y pillarme un rebote considerable. Afortunadamente me encuentro en la fase zen de "ah, pero aún sigues por aquí?", una fase maravillosa porque me ha llevado a contestarle educadamente que mis exámenes fueron bien. Y ya. 

Y es curioso porque aunque tengo unas ojeras tipo panda, granos en la zona del pómulo izquierdo y encima he de hacerle una visita al cirujano (porque si no hubiera cierto grado de drama no sería mi vida) me he sentido plenamente contento de mis avances.

No puedo permitirme el lujo de estar con tonterías, ni puedo ni quiero. He dicho.

¡Feliz entrada de semana!

Preparado, listo, ¡ya!

Hoy he terminado los exámenes. ¡HE TERMINADO LOS EXÁMENES! ¡Al fin! Unos han salido mejor y otros un poco peor pero da igual, ya me lamentaré (si así sucede en tal caso) en septiembre.

Ah, y no sólo tengo ese motivo para celebrar, porque... ¡ya paso de Chico! Y sí, sé que lo he dicho mil veces antes por aquí peeero hubo un momento decisivo que cambió el rumbo de la historia.

El martes pasado a mí me apetecía NADA en absoluto la idea de trabajar así que antes de bajarme del coche, y puesto que ambos compartimos profesión, le mandé un nada inocente whatsapp cargado de intenciones "deberíamos irnos de viaje hoy, no quiero trabajar". Era mi gran apuesta, si su respuesta me convencía, fuera la que fuera, dejaría la puerta entornada; de lo contrario, la cerraría de una vez por todas.

Y... como podéis imaginar no hubieron trompetas ni violines cuando recibí su respuesta. Creo, de hecho, que ni siquiera vibró el móvil. Total, ¿para qué?, no merecía la pena: "Yo no sé lo que haría".

Así que pensé "basta ya de sosería". Un tipo que tras una declaración total de intenciones suelta eso... en fin.

De manera que, ante semejantes hechos, me he calzado las deportivas y estoy dispuesto a volver a la carrera.

Recuperando el norte

"Nunca es demasiado tarde para ser quien deberías haber sido"

No hay nada como adentrarse en la estupidez para darse cuenta de que ya es hora de encauzar de nuevo el camino.

Enhorabuena, está usted cada vez peor

Odio al jodido Chico. Decidió irrumpir como si nada pidiendo perdón por "estar muy ocupado" (como siempre) y desestabilizar mi nueva actitud. Y sí, después de eso volvió a desaparecer. Maldito seas y espero que encuentres a alguien en un futuro próximo que te haga todas y cada una de las fechorías que tú me has hecho a mí.

Además la semana que viene tengo los dos últimos exámenes así que vivo en una especie de auto-reclusión un tanto agobiante pero necesaria. Tenía pensado poder sobrellevar todo gracias a la serie Girls, pero esta nueva temporada está resultando ser una auténtica locura y no me gusta nada.

Y he de anunciar algo horrible. Una medida drástica que debe entenderse solamente desde la necesidad de distracción. Un hombre, que tiene pareja, me propuso que estaría bien conocernos. Sí, sé lo horrible que suena y hasta mi antiguo yo se escandalizaría y tacharía la idea de locura del siglo. Lo malo es que ya no sigo siendo mi antiguo yo y considero que, si quiero olvidar realmente a Chico, no estaría mal tener como pequeña distracción a (y es horrible el nickname) Casado.

Seguiremos informando...